CIUDAD DE MEXICO, 10 de septiembre de 2016 /PRNewswire-HISPANIC PR WIRE/ — La Maison Louis Vuitton se prepara para explorar un nuevo territorio: el del perfume. Aunque sin precedentes y firmemente anclado a la historia de la Casa, este camino olfativo no es territorio inexplorado. Es lo contrario: es sabido el legendario cariño que tenía el fabricante de baúles por los neceseres para artículos de belleza, los frascos para viaje y fragancias marcadas por Louis Vuitton que fueron creadas a lo largo del siglo XX.
La Maison Louis Vuitton da a conocer su taller creativo en el corazón de Grasse, en la región de Provence, en Francia; los antecedentes únicos del perfumero de la Casa, Jacques Cavallier Belletrud, y la paleta de materias primas exclusivas que ha ensamblado desde su llegada. Es una invitación a viajar, un prólogo para una partida inminente.
Como visionarios, el productor de baúles Louis Vuitton y sus descendientes siempre han puesto la innovación en el corazón de la creación. Esto es porque el lujo no debe conformarse con ofrecer únicamente aquello que es raro y valioso: debe anticipar el futuro. Jacques Cavallier Belletrud no se conformó con crear simplemente una extraordinaria gama de materias primas. Durante más de cuatro años, los mejoró. Con ayuda de tecnología de vanguardia, ha producido su propia visión de una paleta de ensueño. Una primera vez.
Visitar los diferentes talleres de Louis Vuitton inspiró a Jacques Cavallier Belletrud para inventar una infusión hecha a la medida. Fascinado por la sutileza de la fragancia de la piel natural de la Maison, Jacques Cavallier Belletrud le pidió al taller de perfume una extracción de esta piel. Es suave y sensual, como descubrir el cuero por primera vez.
Jacques Cavallir Belletrud ha estado interesado por mucho tiempo en la extracción con CO2 supercrítico. Este proceso, el cual ya es utilizado para extraer ingredientes como vainilla, no requiere de calor. Cuando se bañan en gas frío, las plantas revelan toda su sutileza. Jacques Cavallier Belletrud decidió probar este método en flores frescas. El resultado sobrepasó las expectativas del perfumero.
El aroma es tan puro, tan vaporoso, que se siente como si uno estuviera parado en medio de un campo de flores en Grasse. La extracción con CO2 supercrítico de rosa de mayo y jazmín no es sólo una novedad a nivel mundial, sino que también es exclusiva de la Maison Louis Vuitton.
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