SILVER SPRING, Maryland, 2 de marzo de 2018 /PRNewswire-HISPANIC PR WIRE/ — In English — Los estadounidenses dependen de la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) para asegurarse de que las etiquetas de los alimentos contengan información nutricional actualizada que los ayude a tomar decisiones más educadas en cuanto a los alimentos, y que conlleven una mejor salud para ellos y para sus familias. He hecho de la nutrición una de mis prioridades principales, y asegurar que los consumidores cuenten con información precisa y sustentada en la ciencia acerca de la relación entre la dieta y enfermedades crónicas como la diabetes, la obesidad y las afecciones cardiacas, es parte de ese compromiso. Debemos encontrar nuevas formas de aprovechar los datos científicos que estamos aprendiendo sobre la dieta y la nutrición como herramientas para reducir la carga de enfermedad. Nuestra actualización de la emblemática etiqueta de información nutricional incluye cambios significativos para ayudar a los consumidores a tomar decisiones alimentarias más educadas, y ya estamos encontrando la nueva etiqueta en muchos productos.
La etiqueta de información nutricional no ha recibido una actualización significativa en décadas, por lo que, en la transición hacia esta nueva etiqueta más informativa, es importante que proporcionemos una guía cuidadosa para los productores de alimentos y los consumidores. A medida que los productos pasan de la etiqueta anterior a la nueva, existen dos componentes clave para una adopción exitosa. En primer lugar, podemos ayudar a los estadounidenses a aprender acerca de la nueva etiqueta, de modo que puedan usarla para tomar buenas decisiones alimentarias. En segundo lugar, la FDA puede proporcionar una guía clara y detallada a los productores de alimentos a fin de ayudarlos a efectuar los cambios necesarios en las etiquetas de información nutricional para los próximos plazos de cumplimiento. En este sentido, el día de hoy, la FDA anuncia su intención de emprender una gran campaña educativa para los consumidores en torno a la nueva etiqueta, y está dando a conocer varios documentos de orientación para la industria que son clave para ofrecerles aun más ayuda en la adopción de la nueva etiqueta.
La nueva etiqueta de información nutricional incorpora lo último en información sustentada en pruebas acerca de los nutrientes, tales como las azúcares añadidas, para proporcionar a los consumidores más información acerca de sus opciones en materia de alimentos. Por ejemplo, la etiqueta anterior indicaba el total de azúcares en gramos, pero no distinguía entre las azúcares presentes de manera natural en alimentos como las frutas y las verduras, y las que satisfacen la definición de azúcares añadidas. Hemos adoptado como nuestro objetivo concientizar más a los consumidores en cuanto a la cantidad de azúcares añadidas que contienen los alimentos, de acuerdo con las recomendaciones de pautas de alimentación recientes. La nueva etiqueta también contiene el nuevo valor nutricional diario de las azúcares añadidas, de modo que los consumidores puedan entender mejor cómo los alimentos que las incluyen pueden encajar en un modelo de dieta saludable.
Éste es sólo un ejemplo de cómo las nuevas etiquetas proporcionan una información más amplia.
También estaremos emprendiendo una campaña educativa para ayudar a los estadounidenses a utilizar la nueva versión de la etiqueta de información nutricional e interpretar el contenido nutricional general de los productos que encuentran en los estantes del supermercado. Esta oportunidad nos permitirá acercarnos directamente a los consumidores a través de videos educativos, campañas en las redes sociales y sitios de internet fáciles de usar, para ayudarlos a discernir la relación entre las decisiones de alimentación que toman todos los días y el efecto que dichas decisiones pueden surtir en su propia salud y en la de su familia, en cuanto a reducir el riesgo de padecer enfermedades crónicas como obesidad, diabetes, afecciones cardiacas y diversos tipos de cáncer. Esta labor está programada para iniciar cuando el mercado haya adoptado por completo las etiquetas actualizadas. La campaña informativa apoyará el objetivo de salud pública subyacente que el Congreso estableció y que nos propusimos alcanzar con la actualización de la etiqueta de información nutricional: ayudar a los consumidores a utilizar la nueva información para tomar decisiones de alimentación más educadas, y mejorar su salud a través de la dieta y la nutrición.
Y estamos igualmente comprometidos a proporcionar a la industria la información que necesita para adoptar la nueva versión de la etiqueta de información nutricional de una manera eficaz y oportuna. El día de hoy, dimos a conocer guías prácticas que aportan una mayor claridad acerca de varios elementos clave, como las declaraciones en cuanto al contenido de fibra y azúcares añadidas, y el tamaño de la porción.
Esto incluye una guía definitiva con más información sobre las trazas que la FDA está buscando de varios carbohidratos no digestibles que pueden añadirse a los alimentos para contarlos como fibra en la nueva etiqueta. Antes de publicar nuestra nueva definición de fibra en función de las pruebas en 2016, los productores podían declarar fibras sintéticas o aisladas como «fibra» en la etiqueta, incluso si no surtían un efecto fisiológico que fuera benéfico para la salud humana. Nuestra nueva definición permite que las fibras naturales presentes en frutas, verduras y cereales integrales sean consideradas como «fibra», así como otras siete fibras aisladas o sintéticas ampliamente reconocidas por la comunidad científica por sus beneficios fisiológicos. Pero además sabemos de pruebas al efecto de que otras fibras aisladas o sintéticas también podrían beneficiar la salud humana, ya sea mejorando los niveles de glucosa y colesterol, aumentando la frecuencia de las evacuaciones e intensificando la sensación de saciedad (sentirse lleno después de comer), lo cual puede conducir a una ingesta reducida de calorías.
En la FDA hemos venido evaluando los datos que la industria alimentaria nos ha hecho llegar en sus peticiones acerca de diversos carbohidratos no digestibles y pronto comunicaremos nuestras decisiones sobre tales peticiones. Nuestro objetivo es proporcionar más detalles en cuanto a los principios científicos que empleamos para evaluar los productos de fibra y estas peticiones. Queremos ofrecer a la industria alimentaria una guía clara sobre cómo cumplir con las nuevas normas, antes de tomar las decisiones definitivas en cuanto a estas peticiones. Daremos a los peticionarios que deseen añadir información a su petición la oportunidad de modificarla en función de la guía más detallada.
También publicamos una guía preliminar el día de hoy para ayudar a la industria a declarar las azúcares añadidas en la etiqueta de la miel, el jarabe de arce (maple) y ciertos productos de arándano. Aunque la miel y el jarabe de arce satisfacen la definición de azúcares añadidas, escuchamos preocupaciones de la industria al efecto de que declarar las azúcares añadidas en sus productos de un solo ingrediente puede llevar a los consumidores a pensar que a sus productos puros, tales como un tarro de miel o de jarabe de arce, se les añade de hecho azúcar común porque la etiqueta de información nutricional indica «azúcares añadidas». También escuchamos decir a los productores de jugo de arándano que sus productos tienen que ser endulzados por una cuestión de palatabilidad, ya que los arándanos tienen menos azúcar natural que otras frutas. Nuestra guía preliminar atiende estas preocupaciones al declarar nuestra intención de permitir que los productores utilicen un símbolo inmediatamente después del valor nutricional diario de las azúcares añadidas, dirigiendo a los consumidores a un texto que ofrezca información contextual veraz y no engañosa sobre las «azúcares añadidas», y lo que significa para cada uno de estos productos específicos.
Además, en nuestra adopción de la nueva etiqueta de información nutricional figuran requisitos actualizados para los tamaños de porción que reflejan con más exactitud lo que las personas realmente ingieren. En una guía definitiva dada a conocer el día de hoy, la FDA proporcionó orientación en cuanto a las cantidades de referencia adecuadas que habitualmente se consumen para una variedad de productos, a fin de ayudar a los productores a determinar los tamaños de porción adecuados a incluir en su etiqueta.
Todas estas guías reflejan los comentarios que escuchamos en cuanto al deseo de recibir más información sobre estos importantes temas. Conforme avanzamos en la adopción del nuevo etiquetado, creemos que estas guías ayudarán a proporcionar la información que la industria le ha solicitado a la FDA, al plantear el pensar actual de la dependencia en relación con estos temas.
El año pasado, propusimos aplazar la fecha de cumplimiento para la nueva versión de la etiqueta, a fin de darle a la industria más tiempo para adoptar los nuevos requisitos. Más específicamente, propusimos aplazar la fecha de cumplimiento, de julio de 2018 al 1 de enero de 2020 para los productores con 10 millones de dólares o más en ventas anuales de alimentos, y hasta el 1 de enero de 2021 para los productores más pequeños, a fin de darles tiempo suficiente para presentar las nuevas etiquetas y reformular sus productos, de ser necesario. Nuestro plan es emitir una regla definitiva esta primavera.
En las próximas semanas, ofreceremos más detalles acerca de una estrategia nutricional para reducir el número de muertes y enfermedades prevenibles a través de una mejor nutrición. Esta labor aspirará a convertir lo último de la ciencia de la nutrición en medidas prácticas que pueden potenciar aun más a los consumidores para tomar decisiones mejores y más educadas sobre su dieta y su salud. Esto les proporcionará herramientas útiles para tomar decisiones de alimentación saludables, añadiendo claridad a las afirmaciones de la etiqueta de los alimentos, y creará incentivos para que los productores de alimentos elaboren productos que sean más saludables. Todos los estadounidenses deben tener acceso a la mejor información nutricional que les permita tomar decisiones saludables para ellos y para sus familias. Estoy firmemente convencido de que es ésta una parte importante de la misión de la FDA para proteger y fomentar la salud pública.
La FDA, una dependencia del Departamento de Salud y Servicios Sociales de los Estados Unidos, protege la salud pública asegurando la protección, eficacia y seguridad de los medicamentos tanto veterinarios como para los seres humanos, las vacunas y otros productos biológicos destinados al uso en seres humanos, así como de los dispositivos médicos. La dependencia también es responsable de la protección y seguridad de nuestro suministro nacional de alimentos, los cosméticos, los suplementos dietéticos, los productos que emiten radiación electrónica, así como de la regulación de los productos de tabaco.
Información para los medios de comunicación:
Gloria Sánchez-Contreras, 301-796-7686, [email protected]
Información al consumidor:
888-INFO-FDA
www.FDA.gov/Espanol
Logo – http://mma.prnewswire.com/media/622604/FDA_Logo.jpg
FUENTE U.S. Food and Drug Administration