SAN RAFAEL, California, 29 de febrero de 2024 /PRNewswire-HISPANIC PR WIRE/ — Alcohol Justice hace un llamamiento al gobernador de California Gavin Newsom para que el impuesto estatal sobre el consumo de alcohol se adapte a las normas modernas, a fin de fijar la financiación del atribulado sistema de la Universidad Estatal de California (CSU) y otras prioridades educativas.
En California, el alcohol se grava con tipos fijos por volumen producido. Esto significa que el impuesto ha perdido el 55% de su valor debido a la inflación desde que se subió por última vez en 1992. En 2022, el Estado ingresó aproximadamente 429 millones de dólares en concepto de impuestos especiales sobre el alcohol. Sin embargo, simplemente ajustando el impuesto a la inflación se recaudarían 523 millones de dólares más.
«Los impuestos sobre el alcohol son ampliamente populares, eficaces en la prevención y pueden recaudar importantes ingresos estatales con sólo unos modestos ajustes», señaló Cruz Avila, director ejecutivo de Alcohol Justice. Asimismo, agregó: «Sabemos que California ha tomado decisiones dolorosas en la reciente ronda de presupuestos. Si hay que elegir entre subir el impuesto sobre el alcohol o perjudicar a los estudiantes, la opción efectiva parece obvia».
Como parte de las negociaciones presupuestarias, el gobernador Newsom ha propuesto aplazar casi 500 millones de dólares en financiación necesaria para la CSU, así como abandonar una ampliación de 365 millones de dólares de Cal Grant, el principal programa de ayuda financiera gestionado por el Estado. El sistema, que incluye 23 campus en todo el Estado, ya está afrontando déficits de financiación. En 2023, la legislatura aprobó el AB 840, cuya autora era la asambleísta Dawn Addis (D- San Luis Obispo), que pretendía parchear desesperadamente los agujeros presupuestarios facilitando a los campus la venta de anuncios de alcohol dirigidos a estudiantes universitarios.
«Cuando se aprueban proyectos de ley con este tipo de miopía, es mucho más probable que se haga daño a alguien», explicó Michael Scippa, director de Asuntos Públicos de Alcohol Justice. «Alrededor del 40% de los estudiantes de la Universidad Estatal de California son menores de edad. Cuando se fomenta el consumo de alcohol, no sólo aumentan las probabilidades de colisiones, agresiones y lesiones, sino también las probabilidades de que estos estudiantes tengan problemas académicos. Muchas universidades también castigan a los estudiantes menores de edad a los que encuentran bebiendo», añade. También, comentó: «Imagínate ganar dinero anunciando alcohol a los estudiantes y luego echarlos por beber».
Las investigaciones estiman que unos 4,100 jóvenes universitarios mueren anualmente por lesiones relacionadas con el alcohol, de los cuales 2,614 en accidentes de tráfico. Además, en los últimos tres años se ha disparado el número de muertes por drogas relacionadas con el alcohol: el consumo simultáneo de alcohol y opiáceos aumenta enormemente el riesgo de sobredosis. Sin embargo, la investigación ha demostrado desde hace tiempo que el consumo de alcohol y los daños relacionados disminuyen a medida que aumentan los tipos impositivos. Según una revisión sistemática de la bibliografía sobre impuestos sobre el alcohol, duplicar el impuesto reduciría la mortalidad una media del 35%. El aumento de los impuestos sobre el alcohol para prevenir daños ha sido respaldado, entre otros, por el Grupo de Trabajo de Servicios Preventivos Comunitarios, convocado por los CDC y por la Organización Mundial de la Salud.
«Cuando disponemos de una estrategia tan directa, con pruebas tan sólidas y con tanto apoyo internacional, es prácticamente una negligencia no emplearla», comentó Carson Benowitz-Fredericks, MSPH, director de investigación de Alcohol Justice. «La Proposición 13 ha hecho excepcionalmente difícil establecer políticas fiscales eficaces en California, pero arreglar el impuesto especial sobre el alcohol debería ser obvio. Las políticas fiscales sobre el alcohol son sencillas, no punitivas y ampliamente populares. Si el gobernador quisiera bruñir su reputación de líder impulsado por la ciencia y sin pelos en la lengua, éste sería el lugar por donde empezar».
Los impuestos especiales sobre el alcohol son una «tercera vía», pero la subida de 1991 deja claro que la reforma es posible. Los problemas presupuestarios de California no van a aliviarse por arte de magia el año que viene y la normalización del impuesto especial sobre el alcohol repercutiría en los presupuestos futuros. El exgobernador Jerry Brown tuvo iniciativas de subidas de impuestos a la educación y fueron logros políticos emblemáticos de su gobierno. A Alcohol Justice le gustaría que arreglar el impuesto sobre el alcohol y la financiación de la CSU de un plumazo en la revisión del presupuesto de mayo fuera un logro de la firma del gobernador Newsom.
LEER MÁS
Aumentar los impuestos reduce los daños
Aumentar los impuestos sobre el alcohol: mito y realidad
El valor del impuesto sobre el alcohol en California es el valor de sus estudiantes
Contacto: Michael Scippa 415 847-3006
Carson Benowitz-Fredericks 917 426-6443
Foto – https://mma.prnewswire.com/media/2351047/abandoned_classroom.jpg
Logotipo – https://mma.prnewswire.com/media/147418/alcohol_justice_logo.jpg
FUENTE Alcohol Justice