8 consejos para que las personas de la tercera edad puedan ganarle al estrés
WASHINGTON, 13 de marzo de 2015 /PRNewswire-HISPANIC PR WIRE/ — (NU) – A medida que los nacidos durante la explosión de natalidad de la posguerra se jubilan de sus trabajos en índices sin precedentes en los EE. UU., uno tiende a pensar que ellos estarían disfrutando de su tiempo libre con amigos, leyendo el periódico mientras toman café por las mañanas o tomándose vacaciones en enero en algún lugar cálido. Pero muchas de estas personas se encuentran actualmente ante un dilema que pocos prevén para esa etapa de la vida: volver a criar niños. Los censos indican que 2,7 millones de abuelos son responsables del cuidado de sus nietos. Estas nuevas responsabilidades pueden ser gratificantes, pero también causan mucho estrés.
De hecho, hay muchas cosas que pueden generarles estrés a los jubilados; pagar las cuentas con un ingreso fijo, los problemas de salud, el ocuparse de parientes o esposos enfermos, e incluso el ser abuelos. El estrés en exceso puede provocar problemas serios de salud.
«Al estar estresado, el cuerpo libera sustancias como cortisol y adrenalina que afectan a todos los órganos y que provocan tensión en los músculos, secreción de insulina y un aumento del ritmo cardíaco», señaló Arthur Hayward, médico geriatra y Jefe del cuerpo de médicos del Instituto para el Cuidado de Ancianos de Kaiser Permanente.
«No es posible evitar el estrés, pero manejarlo puede ayudarlo a preservar su salud y bienestar», añadió el Dr. Hayward. Recomienda identificar y comprender la causa del estrés y buscar formas de liberarlo, como alguna de los siguientes consejos:
- Modere su propio ritmo. No trate de abarcar demasiado. Sea consciente de sus limitaciones.
- Fíjese objetivos y expectativas realistas, y no tenga miedo de pedir ayuda.
- Planifique tiempo para usted mismo. Recargue sus baterías.
- Haga ejercicio y siga una dieta balanceada. Coma muchas frutas, verduras y alimentos integrales.
- Intente practicar técnicas de relajación como meditación o yoga.
- Duerma lo suficiente. Si tiene problemas para dormir, consúltelo con su médico. El tomar bebidas con cafeína y alcohol puede afectar su capacidad para dormir bien por la noche.
- Hable con alguno de sus afectos o escriba en un diario personal.
- Sea positivo. Los pensamientos positivos pueden hacer la diferencia, como «Tengo esperanza» o «Las cosas van a mejorar».
Para más información, consulte kp.org/healthyaging. Para preguntas o consejos sobre una enfermedad específica, consulte a su médico.